Beatriz de Este: la mecenas


Como prometimos, en esta entrada fijaremos nuestra mirada en algunos de los artistas de quienes Beatriz de Este, junto con Ludovico, se rodeó en su corte: mencionando también alguna obra destacada. 

¡Vamos a ello!

Como primer artista, destacamos a Donato d´Angelo Bramante: Pintor y arquitecto. Artista renacentista enormemente conocido, cuya obra más representativa de la maestría en su oficio fue el  planeamiento de la Basílica de San Pedro.

Pero bajo el apoyo de Beatriz y Ludovico, su obra más destacable quizás sea el ábside y el claustro de la Iglesia de Santa María de las Gracias, en Milán. Es en esta iglesia donde yace Beatriz desde su prematuro fallecimiento, pues se convirtió en el lugar de sepultura de los Sforza en tiempos de Ludovico.


Iglesia de Santa María de las Gracias


Giovani Antonia Amadeo: fue el principal artista detrás de la construcción de la Cartuja de Pavía; una obra que empezaría en 1396 auspiciada por Gian Galezzo Vasconti, y que continuó bajo el mandato de Ludovico Sforza; quien, quizás como testigo de la estima  que como arquitecto e ingeniero le debía profesar, lo nombró ingeniero ducal.


La Cartuja de Pavía

Una vez más, entra en escena Leonardo da Vinci: entre las obras comisionadas por Beatriz y su marido a este gigante del Renacimiento, con algunos maravillosos ejemplos como el "fresco de la última cena" realizado en la antes nombrada Iglesia de Santa María de las Gracias, quiero destacar este retrato de Beatriz, atribuido tanto a él como a Giovani Ambrogio de Pregis, por conformar una de los escasas representaciones de nuestra protagonista que ha llegado a nuestros días.


"La última cena" Leonardo da Vinci




Retrato de Beatriz de Este- Leonardo da Vinci y Giovani Ambrogio
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A continuación me gustaría hablar de una obra muy especial; una obra que ejemplifica muy bien las virtudes como mecenas del matrimonio Sforza-de Este. Y esa obra es el Castillo de Milán, conocido también como Castillo Sforzesco.

La construcción original de este castillo comenzó en el siglo XIV, en el casco antiguo de Milán, primando en ella el carácter defensivo: en su concepción, era una fortaleza. Pero Francisco Sforza, y a continuación Ludovico Sforza, van a reformarlo. Y en esta última reforma, que se lleva a cabo en el 1494, trabajarán artistas de enorme talla, entre los que se incluyen los antes nombrados Leonardo da Vinci, quien va a pintar frescos en diversas salas, y Bramante, quien lo hará en la Sala del Tesoro


Castillo de Milán
               

Por eso este caso resulta tan interesante: tanto por la colaboración de varios de los artistas a quienes patrocinaban, erigiéndose así en una  prueba de la conjunción de  los talentos de los mismo: una destilación de sus particulares gustos como mecenas; como por convertirse el punto cardinal de una corte donde el arte era tan valorado. Aún hoy, es uno de los monumentos de mayor fama de Milán


Por supuesto, estos son sólo algunos ejemplos de los muchísimos artistas que pasaron por su corte, los más representativos de una serie de poetas, pintores, arquitectos, escultores y también eruditos y "científicos" que conformaban la humanista corte de Beatriz y Ludovico Sforza.


Acabamos esta entrada, (¡Y también este blog!), con una última obra. Una obra útil para acercarnos aún más al contexto de la corte de Beatriz de EsteLudovico Sforza, y con la particularidad de estar escrita años después del fallecimiento de ambos.

Se trata del libro "El Cortesano" (1528)  de Baltasar Castiglione. Pese su fecha de publicación, es relevante, pues se cree que la corte de nuestra protagonista es la inspiración para aquella ficticia representada en la obra. Especialmente significativa es esta inspiración si tenemos en cuenta la intención de "El Cortesano": ofrecer un ideal cortesano a encarnar en la Italia renacentista del XV, fantástico testigo del prestigio de la misma; testigo también de su legado, años después de la muerte del matrimonio.

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